Cada semana, los payasos de Sonrisa Médica intentan que el colectivo infantil hospitalizado tenga la oportunidad de reír y evadirse. Esta iniciativa tiene además un impacto positivo en los padres y el personal sanitario.
Durante nuestra visita para conocer en persona el proyecto, el enfermero Aspirino y Sión Camilla así como Dani Ginebroza, el director artístico de la ONG, nos han mostrado como el humor, la música, la magia y la sonrisa movilizan las emociones y liberan las tensiones de los y las pacientes infantiles del Hospital Universitario Son Espases.
De esta manera, los y las pacientes más jóvenes y sus familiares se benefician, las tardes de los lunes, sin ningún tipo de interrupción a lo largo del año, de las visitas regulares de payasos profesionales, competentes y formados, que trabajan en las unidades y servicios del centro hospitalario.
Todos los payasos se adhieren a un código ético que establece las bases de su profesión y proporciona un marco para su trabajo, conscientes de que siempre están trabajando para mejorar el bienestar de los niños, las niñas y sus allegados. “Los payasos de Sonrisa Médica tienen una apariencia alocada, caótica y llena de comportamientos impredecibles, pero detrás de cada uno de estos personajes, hay toda una estructura de gestión compuesta por el equipo profesional nuestra entidad” nos comenta Dani.
Así es como, durante su visita, Inmaculada Martínez, miembro del patronato de nuestra Fundación y Malú Llompart, directora de esta, comprobaron como los payasos están perfectamente integrados en la comunidad sanitaria.
El proyecto de los lunes por la tarde, que ha sido beneficiario de la I Convocatoria de Ayudas a Proyectos Sociales 2022, empezó a finales del año pasado, se prolongará hasta el próximo 6 de noviembre.